El engaste de un diamante flotante crea la ilusión óptica de que un diamante está flotando en el anillo, en lugar de estar sujeto a los acantilados. En la colección de joyas L'Atypique de BAUNAT, el diamante está engastado en el metal de los lados y puede moverse de izquierda a derecha, dando a la joya una sensación de modernidad.